martes, 24 de noviembre de 2009

La guerra se gana leyendo

Fernando Álvarez

Hoy las guerras no se libran cuerpo a cuerpo, en la actualidad las estrategias están dirigidas a dominar la mente del enemigo a través de la información y la desinformación. Nace así la guerra de cuarta generación, la guerra mediática.

“una mentira repetida cien veces se convierte en una verdad”, fue la estrategia de Joseph Goebbels, (jefe de propaganda de Adolf Hitler) que desarrollada durante la segunda guerra mundial logró crear odio y rechazo hacia todo aquel que no perteneciera a la raza blanca noreuropea (raza aria).

Para combatir estas tácticas dirigidas directamente a la mente del ciudadano y la ciudadana común, a los adolescentes e incluso a los niños y niñas, se hace necesario que se prepare y entrene en la lectura. Sí, leer es la única forma de combatir esta estrategia, pues mientras más información se maneje, menor será el impacto de las Operaciones Psicológicas en usted y los suyos.

Pero, el sólo hecho de leer no basta, hay que hacerlo con sentido crítico, analizar el contenido, sacar de él toda su esencia y descifrar su intencionalidad. Para ello es urgente que familiares, amigos y compañeros conformen las Escuadras Revolucionarias de Lectura.

¿Qué es una Escuadra Revolucionaria de Lectura (ERL)?

Es un grupo de 8 a 12 personas, un ente netamente socializador, un lugar donde nos educamos en conjunto para la vida y no para la escuela, para ampliar el conocimiento, desmitificar el saber y leer el mundo desde otra perspectiva, es un espacio abierto a la imaginación y al juego para descubrir el placer de la lectura y el deseo de aprender, como dice el poeta Gustavo Pereira: “…para inculcar el amor a los libros, a la lectura, no como un castigo sino como un placer, como en verdad lo es”.

¿Quién me apoya?

El Gobierno Revolucionario ha entendido la necesidad de trascender en la educación de la población del país y, el 25 de abril de 2009, lanzó el Plan Revolucionario de Lectura (PRL) con la finalidad de impulsar el conocimiento, rescatar la identidad nacional y contribuir a la creación del hombre y la mujer nueva, a través de las ERL

Este Plan cuenta con una Oficina Nacional, conformada por los Ministerios del Poder Popular para las Comunas, Educación Superior, Educación y Cultura, la cual atiende a través del número telefónico 0800-LECTURA (532.88.72)

“Leer, leer, leer y leer, consigna de todos los días. Lectura para la conciencia. Tenemos que inyectarle a la contrarrevolución todos los días una dosis de liberación a través de la cultura (…) Nada mejor que la cultura libertadora, nada mejor que el arte verdadero y todo arte es libertador. Cualquier cosa que pretenda ser arte pero que oprima al pueblo no puede considerarse como arte”, expresó el Comandante Chávez al referirse a la orientación de dicho plan.

Para lograr el objetivo el gobierno pone a disposición material bibliográfico como la Biblioteca Popular para los Consejos Comunales, guías y libros específicos del PRL, publicaciones encartadas en periódicos y revistas de circulación nacional (Todosadentro, Memorias, A Plena Voz…), publicaciones que emprende el Ministerio del Poder Popular para la Cultura mediante sus editoriales (Fundación Editorial El Perro y la Rana, Monte Ávila Editores y la Fundación Biblioteca Ayacucho) que pueden ser adquiridos a precios solidarios, a través de la Red de Librerías del Sur ubicadas en todo el país

“En Venezuela se ha publicado alrededor de 50 millones de ejemplares, entre libros, revistas y otras publicaciones (…) 50% de esos bienes culturales se reparten gratuitamente entre toda la población” así lo afirmó Héctor Soto, ministro del Poder Popular para la Cultura, en rueda de prensa durante la instalación de la V Feria Internacional del Libro (Filven) 2009.

No hay excusa, las estrategias están trazadas, los pertrechos a disposición de todos y todas, queda de parte de usted tomar la iniciativa y apoderarse del conocimiento para luchar la batalla de las ideas y ganar la guerra mediática, con verdadero sentido patriótico, de soberanía y libertad.